Una vez más incurro en la creación de un blog con la esperanza de que esta vez sea el último, porque ya todos los nombres están tomados y la creatividad es algo escaso en estos días en los cuales lo único que me importa es un beso bien dado, un abrazo cálido, un recuerdo de una vida que ya tiene casi 20 años y le queda tanto por vivir, pero que ya transitó los caminos más oscuros del mundo, ahí donde casi nadie se anima a entrar por miedo a perderlo todo. Yo ya lo perdí todo, y también lo gané. Gané la posibilidad de vivir sin arrepentimientos, sin verguenza. Gané a un hombre maravilloso que me hace feliz con su sonrisa, gané amigas para toda la vida, con las cuales ya contamos casi una década de amistad, de vivencias, de llantos contenidos. Gané un trabajo el cual no se si me agrada totalemente pero el cual me da un sustento para transitar el día a día. Gané una carrera que todavía no empecé pero me apasiona el hecho de hacerla y ser algún día alguien.
Demasiadas ganancias, creo que en algún momento la balanza se inclina y te infoma que pronto va a llegar la hora de empezar a perderlo todo.
Y acá estoy, esperando el impacto
No hay comentarios:
Publicar un comentario