Osiris

Pasan las horas, rozando la locura preso de mi poesia. Mucho altibajo, poca llanura soy ladron y policia. Caen las gotas, sin previo aviso viniendo del mas alla. De un inconsciente, ya inmanejable que no me deja vivir en paz...De a poco oxidan, esta armadura. Dificil de abandonar Tengo una cita conmigo que no me animo a afrontar. Estoy tan lejos de mi que no alcanzo a ver mi escencia. Pobre de vos, hoja en llamas te descargo mi paciencia...En el juicio de los muertos frente a osiris mi corazon romperia la balanza. Y sin embargo no consigo darme cuenta que fantasma dara a luz mi desconfianza. Pero prometo, a mas nadie que a mi mismo triunfar de nuevo en este juego apasionado. Y el dia que ya no le tema a los abismos Agradecer a quien estuvo siempre al lado.. No quiero cantar victoria por describir lo que siento En mi estado, tras la gloriay el imperdible momento. Y a vos cancion, de ira y esperanza prometo no abandonarte. Yo tambien tengo un nudo en la panza por no poder liberarte pero, pero al menos por ahora tu lugar es un cajon porque es falta de respeto, cantarte sin emocion. Y este intruso que hay en mi, no te merece cantarte merece alguien mas grande capaz de inmortalizarte...

Todos los días que van pasando me siento menos cuerda, más loca, más alterada. Al mismo tiempo siento que la edad viene con un poco de sabiduría, cada minuto que pasa los que andamos por los 20, nos damos cuenta de que hay miles de cosas que vamos aprendiendo, a no ser tan impulsivos, pero al mismo tiempo a dejarnos llevar por los impulsos más carnales, mas viscerales, de ser pasionales. Porque la vida es una sola y hay que aprender a disfrutar de cada segundo, porque lamentablemente, no va a volver. Un profesor en tercer año, a propósito de un cuento de un tano que se llama "mujer que cae", nos dijo, el tiempo pasa, no lo escuchan tic tac tic tac. Y eso me quedó marcado a fuego. Cada segundo es maravilloso, a pesar de los llantos, de que el corazón cada vez duela más. Porque estamos respirando, porque estamos vivos. Y cada uno tiene su tiempo sobre la tierra, años en los cuales tenemos que tratar de dejar nuestra huella, nuestro paso tiene que ser con fuerza, con ganas, con todas las de ganar. No pasemos desapercibido, marquemos nuestros pasos con fuerza. Vivamos con dignidad y también con un poco de verguenza, de hacer paparruchadas.

Mucho altibajo, poca llanura.